La humedad y condensación en el barco se produce cuando por exceso de humedad ambiental el aire es enfriado a lo que llamamos su punto de rocío, entonces se produce la condensación. El aire cargado de humedad se encuentra con superficies frías como puedan ser escotillas, las paredes o techos del barco, provocando el paso gaseoso a líquido. Los barcos están continuamente siendo afectados por un exceso de humedad. Esta humedad relativa en el aire hace proliferar una excesiva presencia de bacterias, hongos y moho que son los que causan el mal olor y también producirán daños en los equipos electrónicos y en el mobiliario del barco, estropeando la madera, colchones y materiales metálicos. Todos estos problemas se hacen más acuciados cuando dejamos nuestro barco amarrado durante un largo período de tiempo.
La humedad y condensación en el barco puede ser evitada fácilmente siguiendo las siguientes recomendaciones:
1.- Ventilar periódicamente el interior del barco abriendo escotillas, lumbreras y tambuchos para permitir la entrada de aire fresco y dejar salir el aire con exceso de humedad.
2.- Evita dejar ropa húmeda, toallas o cualquier material como chalecos salvavidas, velas, o cabos húmedos en el interior de la embarcación. Todo este material deberá de ser tendido al sol para guardarlos bien secos.
3.- Mantén siempre que sea posible la temperatura interior por encima de la temperatura de rocío.
4.- Reduzca la humedad del aire utilizando deshumidificadores. Existen diferentes tipos, los electrónicos necesitarán energía eléctrica. Otros más sencillos y
baratos pero también muy eficientes son a base de granulados de gel de sílice que al entrar en contacto con el aire absorbe la humedad y depositan el agua absorbida en una cubeta. De esta forma se van eliminando los excesos de humedad de una forma constante. Este tipo es especialmente recomendado durante la navegación y para largas estancias de invernaje donde no se pueda dejar corriente eléctrica conectada. El granulado se autoregula, si la humedad es demasiado baja, deja de absorber y si es más elevada se consume antes el granulado. Tiene una duración de 2 a 3 meses.
5.- Periódicamente abra armarios y tambuchos para permitir al aire caliente secar la humedad de los espacios interiores cerrados.
6.- Seca bien con toallas y bayetas cualquier resto de humedad después de utilizar la ducha y la cocina, ventilando bien estos compartimentos.
7.- Inspeccione habitualmente el barco en busca de lugares donde pueda entrar el agua. Filtraciones de agua desde el exterior por algún defecto en juntas de escotillas,
tambuchos o del aislamiento de paredes y techo afectarán también en el interior del barco, haciendo necesario la localización del problema para realizar las reparaciones
necesarias de las zonas afectadas.
8.- Durante el invernaje mantén levantados los colchones, colchonetas y cojines para permitir que el aire corra alrededor de ellos.