Que tiemblen DHL y UPS, porque Amazon ha lanzado su propia línea aérea

Con Prime Air, el gigante quiere ahorrar costes de envío


Acostúmbrese al nombre de Prime Air porque seguramente no va a dejar de oirlo en los próximos años. Es una nueva línea aérea que se presenta esta misma semana en un festival aéreo en Seattle, y su propietario aspira a convertirse en el rey de la logística apoyándose en ese imperio de la venta a distancia que es Amazon.

La compañía fundada por Jeff Bezos, enfrascada en una batalla a cara de perro con la china Alibaba, no ha dejado de expandirse en el mercado de forma vertical y con la vista puesta en los consumidores, hasta eliminar a la práctica totalidad de los intermediarios. Parece que le ha llegado la hora de recorrer ese mismo camino pero en sentido contrario, y con Prime Air podría aspirar a prescindir de gigantes mundiales de la paquetería que se han lucrado con la pujante actividad de la tienda on-line, como DHL o UPS.

Quizá lo más curioso en este lanzamiento es que Amazon ha bautizado a su compañía de carga como Prime Air, el que desde 2013 parecía que iba a ser el nombre de su servicio de drones. Pero también llama la atención el nombre que recibirá el primero de sus aviones transcontinentales, y que es un guiño al utilizado por el presidente de los Estados Unidos de América en sus desplazamientos: Amazon One.

Será el primero de una flotilla de 11 aviones 767-300 utilizados en régimen de leasing, pero la compañía no oculta que sus ambiciosos planes le llevarán a sumar un total de 40 en los próximos años. Eso le dejará todavía lejos de los más cerca de 75 con los que cuenta DHL en sus cinco filiales de aviación, y de los más de 230 que tiene en activo UPS, pero le permitirá crear corredores intercontinentales de alta frecuencia, prescindiendo en parte de sus proveedores habituales.

Este movimiento de Amazon es un paso más en la estrategia de la compañía por controlar los costes logísticos, y de hecho desde comienzos de este año el gigante del comercio electrónico anunció sus planes para robotizar las operaciones de estiba y desestiba de los portacontenedores (tiene de hecho licencia de naviera), y cuenta ya con un parque de tráilers propios en Estados Unidos que se calcula en varios millares de unidades.

Fuente: El Economista