Nueva generación de satélites para llegar donde no llega la fibra

España es un país de referencia, en cuanto a la infraestructura de fibra óptica, según su situación actual, y según su evolución. Pero el desarrollo de la cobertura está frenándose, en tanto que Telefónica ya ha cubierto los núcleos de población más grandes y está ahora desarrollando su red en zonas de población más reducida. El coste de inversión es más elevado en estas zonas, por la cantidad de viviendas unifamiliares, y habrá zonas rurales donde probablemente nunca llegue la fibra. Ahí entran en juego las redes por satélite, y la presidente de Hispasat adelanta que hay una nueva generación en camino.

Allí donde no llega la fibra óptica, que cada vez serán menos zonas, es donde la red de satélitespresta conexión a Internet. La presidenta de Hispasat ha hablado al respecto. Según comenta, el nuevo satélite 30W-6 está ya en funcionamiento, y la compañía está ampliando las posiciones orbitales para futuros satélites. Durante el último año se han lanzado tres satélites, precisa. Hispasat tiene ‘en el punto de mira’ el lanzamiento de Amazonas 6, un comienzo en el cambio estratégico de la firma que pasa por una apuesta completa en satélites de mucha más capacidad, para ser competitivos donde no alcanza la fibra óptica.

Amazonas 6 promete ser la ‘revolución’ del Internet por satélite: las mejores prestaciones donde no llega la cobertura de fibra óptica

Las zonas rurales son el punto de mira de Hispasat, y en definitiva, del despliegue de Internet por satélite. Según la presidenta, se va a llevar a cabo una campaña muy fuerte para las zonas rurales; hay que encontrar una combinación óptima, y eficiente, para que sea posible alcanzar una cobertura del 100%. El Amazonas 6 tiene planteado su lanzamiento para finales de 2021, o 2022, pero Hispasat quiere hacer más competitivo el precio por megabyte, y para ello necesitan satélites de gran potencia. Una posibilidad es un satélite de mucha capacidad, que permita cubrir toda la Península.

La banda K juega un papel protagonista en todo esto: velocidades mucho más relevantes que las actuales, y satélites de muy alta capacidad para dar el salto a medio terabyte. Competir donde está la fibra, comenta, es absurdo. Pero el reto está en que el satélite actúe como pieza de encaje. En tanto que no es posible cubrir todo con la infraestructura terrestre, el satélite es una buena respuesta y tiene que plantearse en términos de complementariedad.

Fuente > eleconomista/Adslzone