La figura de un emperador que ha pasado a la historia por sus grandes locuras, su maldad y el terror que suponía estar en el foco de su atención, tenemos que hablar sin duda de Cayo Julio César Germánico o Calígula, nombre que adoptaría cuando asumió el cargo de Emperador. Una persona con graves problemas psiquiátricos, que puso en jaque a todo un imperio durante los años en los que gobernó hasta su muerte en el año 41 d.C. Pocos años después de la muerte de Calígula, Roma volverá a revivir una situación similar, otro emperador gobernaría con unas cualidades similares, Nerón. En este artículo vamos a centrarnos en la figura del Emperador Calígula, más concretamente en La Locura de Calígula.

 

 

 

LA LOCURA DE CALÍGULA | SU INFANCIA Y ADOLESCENCIA

Cayo Julio César Germánico nació en Antium, lo que hoy es Anzio, el 31 de agosyo del año 12 d.C. Su padre, General Cónsul de Roma y Gobernador de Germania, llamado Germánico y su madre Agripina la Mayor, modelo de mujer virtuosa de Roma.

El padre de Cayo Julio fue uno de los más grandes generales que tuvo el Imperio Romano, perteneciente a la dinastía Julio-Claudia. El matrimonio tuvo nueve hijos, de los que sólo seis sobrevivieron al nacimiento, Julia Livia, Drusila, Agripina, Druso César, Nerón César y Cayo Julio César, el futuro emperador Calígula.

Recibió el sobrenombre de Calígula, por unos acontecimientos que tuvieron lugar cuando éste apenas contaba con dos o tres años y su padre le llevó a las campañas que lideraba al Norte de Germania. Cayo Julio vestía con tan solo dos años el uniforme completo militar, con su armadura y sus botas.

El aspecto simpático del niño, hizo que todos los soldados se divirtieran al verlo llegar tan serio y con su uniforme, poniéndole el sobrenombre de “botitas” o lo que es lo mismo “calígula”. Nombre que odió durante toda la vida y que a nadie se le ocurriría volver a mencionar en su presencia.

Pero también vivió momentos muy duros desde muy niño, con tan sólo 7 años y acompañando a su padre Germánico a unas campañas que se estaban dirimiendo en Siria, Germánico fue envenenado y el 10 de octubre del año 19 d.C., falleció. El General Germánico se estaba convirtiendo en un rival peligroso político para el emperador Tiberio, quién parece ser fue el instigador del asesinato.

Con la muerte de su padre, Cayo Julio, se trasladó a vivir a Roma junto con su madre. Tras el trauma por la muerte de su padre y un cambio radical de ciudad, amigos, etc,  el pequeño Cayo Julio comenzó a dar muestras de un gran intrusismo, refugiándose en su caballo, a quien concedía la mayor parte de su tiempo y el mejor de los cuidados.

Tiberio temeroso de que Agripina pudiera de nuevo contraer matrimonio y por su posición de linaje pudiera ser un posible competidor, optó por quitarse un posible rival. La mejor forma que encontró de apartar a Agripina de Roma fue denunciarla por traición. Esta denuncia falsa consiguió exiliar tanto a Agripina como a su hijo Nerón César.

Calígula en aquella época, año 29 d.C. ya contaba con 17 años, era un jovencito adolescente y se le envió a vivir con su bisabuela y madre del emperador Tiberio, cuando Livia, la madre del emperador falleció, su abuela Antonia fue la que se hizo cargo del joven Calígula.

LA LOCURA DE CALÍGULA | PREPARANDO EL CAMINO

Pero una serie de hechos acontecidos entorno al año 30 d.C. como fueron el encarcelamiento de su hermano Druso y la muerte de su hermano Nerón en el exilio, hicieron plantear una estrategia al joven Calígula que le permitiera en primer lugar salvaguardar su vida y en segundo lugar llegar a ocupar en un futuro, no muy lejano, el cargo de Emperador.

Calígula intentó por todos los medios permanecer lo más cerca posible a Tiberio, de hecho llegó a formar parte del séquito de acompañantes de éste. Se sentía bien al lado del emperador y hacía sentirse bien también al emperador con su compañía. Este sentimiento que a muchos les extrañó, formaba parte de la estrategia de Calígula, mientras escondía su resentimiento.

Gracias al esfuerzo que puso Calígula en congraciar y en conseguir la total confianza del que había sido responsable de la muerte de su padre, consiguió el cargo de cuestor, mientras tanto su madre también fallece. Gracias a distintas amistades a quienes Calígula incitó para que hablaran bien de él frente a Tiberio, consiguió que en el año 35 Calígula y el nieto de Tiberio, llamado Tiberio Gemelo fueron proclamados herederos al trono de Roma.

LA LOCURA DE CALÍGULA | EL EMPERADOR

Cuando Calígula subió al poder en el año 37, tras la muerte del emperador Tiberio, se sintió querido y aclamado por su pueblo. Durante los primeros meses de gobierno, los resultados fuero buenos, manteniendo el respeto a las decisiones del Senado y mejorando la Asamblea Popular con el fin de que volvieran a se ellos los que eligieran a los magistrados, un derecho que habían perdido anteriormente.

Calígula intentó que su pueblo le quisiera y unas de las primeras leyes que decretó fue una amnistía general para todos los condenados en la época de su antecesor Tiberio. También se caracterizó por la organización de grandes festejos circenses para la población. 

Todo cambió en octubre del año 37, en esta fecha el joven Calígula cae gravemente enfermo, según los médicos esta enfermedad se debía a los excesos del emperador. Pero la noticia sentó como un jarro de agua fría para su pueblo, tras haber vivido un periodo de gran esplendor gracias a su nuevo emperador, este está ahora a punto de morir.

Calígula consiguió restablecerse de la enfermedad, pero las fiebres tan altas sufridas hizo que su carácter cambiara, a partir de este momento comenzó a mostrarse con un carácter autoritario y absolutista, nada mas lejos del pensamiento de un Imperio Republicano.

Calígula comenzó a modificar las bases de la república, a partir de ahora el emperador tenía carácter divino. Con esta autoridad divina, mandó asesinar tanto a su primo Tiberio Gemelo como a Macrón, jefe de la guardia pretoriana.

Las fiestas en la corte se convirtieron en fiestas de lujos, comida y prostitución, gastos que financiaba Roma, guerras interminables que causaban grandes gastos, todos estos gastos tan importantes frente a unos ingresos menos abundantes, provocaron la banca rota de las arcas del estado.

Calígula encontró la solución subiendo impuestos y matando a los senadores rivales con el fin de quedarse con sus posesiones.

Comenzó a reducir el poder autónomo de los territorios conquistados hasta que en el año 41, una conspiración que había sido urdida entre las propias filas de su guardia, acabó con la vida del emperador Calígula el 24 de enero del año 41 d.C.

En la próxima actualización comenzaremos por un apartado donde haremos constar las locuras y excentricidades de este emperador que a pesar de haber sido muy amado, se convirtió en un tirano con su pueblo.

Fuente Sobrehistoria