Dos posibles Tierras a solo 40 años luz

Un equipo de astrónomos ha confirmado que dos exoplanetas cercanos quizá situados en la zona habitable son rocosos, como la Tierra, y poseen atmósfera.

Exoplanetas

 

 

 

 

 

 

El sistema TRAPPIST-1, a unos 40 años luz de la Tierra, está presidido por una estrella enana ultrafría alrededor de la cual orbitan tres planetas del tamaño de la Tierra. Desde su hallazgo, estos mundos han despertado el interés de los astrónomos, no solo porque nunca antes se habían detectado objetos de este tipo en torno a una estrella tan pequeña –esta sería algo más grande que Júpiter, y su brillo apenas representaría un 0,05% el del Sol–, sino porque, según parece, al menos uno, sino todos, se encontraría en la zona habitable de su barrio galáctico. En esta región se darían las condiciones necesarias para que existiera agua en estado líquido en su superficie, y quizá la vida tal como la conocemos.

 

Ahora, el mismo equipo de investigadores que anunció el hallazgo de esos exoplanetas ha revelado que los dos más cercanos a su estrella son mundos rocosos, como la Tierra, Venus o Marte, y que como estos poseen atmósferas más compactas que si se tratara de planetas gaseosos, como Júpiter o Saturno. En un artículo publicado en la revista Nature, estos científicos señalan, no obstante, que es preciso llevar a cabo más estudios para determinar la estructura y composición de su cubierta de gases: quizá esté formada por vapor de agua y carecer de nubes o quizá ser tan densa como la de Venus, compuesta sobre todo por dióxido de carbono; podría, incluso, parecerse a la de la Tierra.

Los astrónomos, coordinados por Julien de Wit, del Departamento de Ciencias planetarias, atmosféricas y de la Tierra del Instituto Tecnológico de Massachusetts, utilizaron el telescopio espacial Hubble para observar el doble tránsito de ambos exoplanetas, el momento en que los dos pasaban simultáneamente frente a su estrella. Se trata de un fenómeno poco habitual, y de hecho los científicos se percataron de que iba a tener lugar solo dos semanas antes de que ocurriera. En todo caso, les permitió realizar un análisis espectroscópico preliminar de sus atmósferas.

Imagen: NASA / ESA / STScI

Fuente:Muy Interesante