Al igual que sucede con muchas obras perdidas de la Antigüedad, su contenido se puede reconstruir parcialmente por las citas de autores posteriores. Es lo que ocurrió por ejemplo con la historia fenicia de Sanjuniatón. Y también con la obra de Megástenes titulada Indica, donde relata su viaje a la India en el siglo III a.C.
Megástenes nació en el año 350 a.C. en la península anatolia, siendo testigo de las conquistas de Alejandro Magno y el posterior reparto de su imperio por los diádocos. Poco se sabe de su vida hasta que lo encontramos en la corte de Seleuco I Nicátor, cuyo reinado se inició en el año 305 a.C.